¿Sabías que el 50-72% de las mujeres sufren de dolor lumbar y/o dolor pélvico durante el embarazo, pero solo el 32% hace algo al respecto? ¡Miremos más de cerca!
El dolor lumbar relacionado con el embarazo puede ser un síndrome muy debilitante que representa la causa más común de baja por enfermedad para las mujeres embarazadas. En 2004, los estadounidenses gastaron $26,1 mil millones de dólares en un esfuerzo por encontrar alivio al dolor de espalda durante el embarazo. Las estadísticas muestran que una de cada diez mujeres experimentará diariamente dolor lumbar DISCAPACITANTE, durante al menos dos años después del parto.
Debido al número limitado de opciones de tratamiento disponibles para la mujer embarazada debido a velar por la seguridad de la madre y el feto, y dada la alta propensión de dolor lumbar relacionado con el embarazo potencialmente discapacitante que puede limitar significativamente la función y la calidad de vida, ¡La atención quiropráctica parece ser una opción natural para esta población! Obviamente, los productos farmacéuticos y la cirugía NO son opciones adecuadas para la futura madre, incluso durante el período de lactancia después del parto. La quiropráctica ofrece un enfoque no invasivo y seguro para tratar el dolor lumbopélvico y utiliza muchos enfoques diferentes.
En un artículo de investigación de 2009, 78 mujeres participaron en un estudio que investigó la discapacidad, la intensidad del dolor y el porcentaje de mejora después de recibir atención quiropráctica para tratar el dolor lumbar relacionado con el embarazo. En este artículo, el 73% informó que su mejora era "excelente" o "buena". Para la discapacidad y el dolor, el 51% y el 67% (respectivamente) experimentaron una mejora clínicamente significativa. Los investigadores les dieron seguimiento once meses después y encontraron que el 85,5% informó que su mejora era "excelente" o "buena". Para la discapacidad y el dolor, el 73% y el 82% (respectivamente) experimentaron una mejora clínicamente significativa.
Entonces, ¿Qué causa el dolor lumbar en mujeres embarazadas? Debido a los cambios biomecánicos que ocurren en la zona lumbar y la pelvis durante un período de tiempo relativamente corto durante el embarazo, especialmente en el segundo y tercer trimestre, los generadores de dolor comunes incluyen (pero no se limitan a): La articulación sacroilíaca, las articulaciones facetarias, discos amortiguadores y los numerosos músculos conectores (distensiones) y ligamentos (esguinces). Durante las últimas etapas del embarazo, la hormona relaxina prepara la pelvis para el parto al ensanchar la cintura pélvica, lo que también puede ser problemático.
Las opciones de tratamiento dentro de la quiropráctica a menudo incluyen manipulación de la columna, ejercicios lumbopélvicos, educación del paciente, corrección de la postura, masajes, cinturón sacroilíaco, movilización de tejidos blandos y más. Los ejercicios que se enfocan en los músculos transverso del abdomen, multífidos y del piso pélvico, ayudan a estabilizar la región lumbopélvica. The American College of Obstetricians & Gynecologists (El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos) recomienda hacer ejercicio al menos tres veces por semana durante el embarazo, y los estudios reportaron que NO hubo complicaciones obstétricas (trabajo de parto prematuro, rotura prematura de membranas o cambios en el peso materno o neonatal) con el ejercicio.
Entonces, ¡La respuesta es clara! Cuando el dolor lumbar relacionado con el embarazo ataca, busque atención quiropráctica para atender de manera segura y efectiva el dolor y la discapacidad, y para que pueda ¡DISFRUTAR DE SU EMBARAZO!
