El dolor lumbar es una de las quejas más comunes que se presentan en los consultorios quiroprácticos y sigue siendo una de las afecciones más difíciles de manejar porque hay muchas causas. Algunas de sus causas incluyen lo obvio, como levantar peso excesivo, actividades de uso excesivo, como lesiones deportivas (bolos, golf, esquí, tenis, fútbol, entre otros), rastrillar hojas, quitar nieve y más. Con frecuencia, las tensiones relacionadas con el trabajo son la causa principal del dolor lumbar debido a las posiciones constantes, persistentes e incómodas que se requieren con frecuencia en muchos trabajos.
La causa también puede ser tan simple como pararse en dos pies en vez de a cuatro patas. Los estudios muestran que cuando se comparan animales de dos y cuatro patas, la artritis comienza en la tercera y sexta década de la vida, respectivamente, debido a la carga vertical que soporta el animal bípedo o de dos patas. Debido a que somos especies de dos piernas, tener una pierna corta puede tener beneficios significativos para cualquier afección de la columna. Esto se debe a que una pierna corta de solo 5 mm (1/4 de pulgada) puede provocar una caída en la pelvis que crea una base torcida sobre la que se asienta la columna vertebral, lo que lleva a una curvatura anormal de la columna. Esto ejerce presión sobre los componentes de la columna, incluyendo la médula espinal y los nervios, y puede contribuir o ser la causa real, no solo del dolor lumbar, sino también de problemas en la parte superior de la columna, como dolor de cuello y dolores de cabeza.
Muchas veces, no se logra un resultado satisfactorio hasta que el problema de la longitud de la pierna se aborda con el uso de una plantilla o una combinación de plantilla y suela de elevación. En un caso, el tratamiento aplicado en el cuello y la cabeza tuvo poco efecto sobre los dolores de cabeza del paciente y solo después de colocar una plantilla elevadora en un zapato y un soporte para el arco en ambos zapatos, informó una mejoría significativa.
En la mayoría de los casos, el tratamiento integral dirigido a todo el cuerpo, desde los pies hacia arriba, produce los resultados más satisfactorios. Además, cuestiones secundarias como la dieta, el manejo del estrés y los tratamientos en casa (incluidos los ejercicios) pueden ser muy importantes para el manejo exitoso del dolor de espalda. En muchos pacientes, una combinación de quiropráctica, corrección de la longitud de las piernas y control nutricional, incluido el uso de vitaminas y hierbas, produce los mejores resultados.
Por lo general, ofrecer al paciente consejos sobre los métodos de aplicación de hielo, modificación/reducción de las actividades de flexión/levantamiento, así como realizar el tratamiento quiropráctico satisfará a la mayoría de los pacientes. Sin embargo, en algunos casos, es necesario el manejo conjunto con otros proveedores de atención médica aliados, especialmente cuando hay una respuesta lenta en la etapa aguda inicial del dolor lumbar. Si ocurrieran estos casos menos comunes, la combinación de quiropráctica y atención primaria produce los mejores resultados.