Este artículo analiza cómo la ira y la expresión emocional pueden afectar tu dolor de espalda. Durante años, muchos médicos pensaron que el dolor de espalda era más un problema del cerebro que de la columna. Las investigaciones han demostrado que este es el caso de muchas personas con discapacidad laboral. Pero las lesiones mecánicas por esguinces en la columna también son fundamentales para el funcionamiento del cuerpo y la cantidad de dolor que puedas experimentar. Simplemente no puedes separar el cerebro del cuerpo y esperar atacar un problema difícil como el dolor lumbar.
Los investigadores de la Universidad de Duke analizaron este complejo problema midiendo la cantidad de expresión emocional, enojo, y dolor de espalda en un grupo de 61 personas con dolor lumbar crónico. Los resultados fueron bastante interesantes. Los pacientes que informaron un mayor conflicto con respecto a la expresión emocional pueden estar experimentando un mayor dolor e ira.
¿Alguna vez has considerado que la forma en que expresas tus emociones podría afectar cuánto te duele la espalda? ¿Mantienes pensamientos y sentimientos de ira? Ignorar estos problemas no hace que el problema desaparezca. Ocultar tus emociones con un cóctel de medicamentos no parece una buena solución a largo plazo, especialmente con los efectos secundarios nocivos para la salud que a veces pueden ocurrir.
Por supuesto, hay una diferencia entre "explotar" con alguien y expresar las emociones de manera apropiada. ¿Has intentado abrirte con alguien? Un amigo o consejero puede ayudarte a mostrar cómo se pueden manejar tus emociones de manera constructiva. Algunos pacientes tienen graves conflictos emocionales y pueden requerir de apoyo psicológico. Otros pueden estar más "sintonizados" con el lado emocional de la vida a través de la simple conciencia. ¿Tu espalda se inflama durante los períodos emocionales de tu vida? Tu médico quiropráctico puede ayudarte con las tensiones mecánicas de la columna, pero para maximizar tu potencial, debes considerar las emociones y el cerebro. Al integrar un enfoque de la salud mente-cuerpo, la complejidad del dolor de espalda se aborda de manera más completa, lo que puede ayudarte a mejorar tu perspectiva de la vida y volverte más activo y comprometido.
Tener dolor crónico no es divertido ni para el paciente ni para sus amigos, compañeros de trabajo y familiares. Entonces, si crees que tus emociones (o falta de emociones) pueden tener algo que ver con tu dolor de espalda, consulta a un proveedor de atención médica competente que ofrezca un cuidado integral a la persona en su totalidad. Cuando los pacientes pueden afrontar estos problemas en un entorno tranquilo y de apoyo, a menudo se reduce la necesidad de medicamentos.