"Me desperté ayer por la mañana con un fuerte dolor de cuello que se irradia desde mi brazo derecho hasta mi mano y apenas puedo mover el cuello sin producir el dolor en el brazo". O, "... durante los últimos meses, he tenido este dolor persistente en mi cuello y cuando miro hacia arriba, mi brazo se adormece". O, "Cada vez que inclino la cabeza hacia la izquierda, mi brazo izquierdo se adormece. Me he dado cuenta de que cuando levanto pesas, solo puedo realizar 15 libras con mi brazo izquierdo en comparación con 35 libras con el derecho". Estas son historias comunes que describen un clásico "nervio pinzado en el cuello". Entonces, ¿qué es un "nervio pinzado"? Para responder a esto, veamos primero qué es un "nervio".
En el diagrama anterior, los nervios salen de la médula espinal. Los de la región del cuello bajan por el brazo y los de la espalda baja por las piernas. La médula espinal es la "autopista" que trae información desde los nervios de los brazos, piernas, tronco, etc., al cerebro donde se procesa la información. La columna vertebral ósea alberga y protege la médula espinal y el cráneo protege el cerebro, pero no hay protección ósea para los nervios. Los nervios traen información al cerebro que nos permite sentir, saborear, oler, ver y mover nuestras piernas y brazos para realizar movimientos complejos como bailar, correr, gimnasia, etc. La información va y viene constantemente del cerebro para permitirnos funcionar normalmente. El nervio se puede "pellizcar" en cualquier parte de su curso, incluida la muñeca (síndrome del túnel carpiano), el codo (síndrome del túnel cubital), el hombro (síndrome de la salida torácica) y/o el cuello (hernia discal y/o artritis). Esto da como resultado una ralentización de la transmisión de información hacia/desde el cerebro y puede producirse entumecimiento, dolor, pulsaciones y debilidad en la fuerza.
Hay dos tipos de afecciones que comúnmente pellizcan los nervios, que generalmente ocurren en diferentes momentos de la vida: aquellos con una hernia de disco (más jóvenes > pacientes mayores) y aquellos con artritis (pacientes mayores > más jóvenes). También puede ocurrir una combinación de las dos condiciones que producen el efecto de pellizco en el nervio, lo que hace que el proceso de diagnóstico sea un poco más complicado. El siguiente diagrama ayuda a explicar estas condiciones:
Los nervios salen de la columna a través de orificios que pueden estrecharse si la parte central gelatinosa del disco se hernia hacia afuera y dentro del nervio empujándolo contra el hueso que forma el orificio a través del cual sale de la columna. Un "espolón óseo" (como se muestra en el diagrama de la izquierda, que sale de la articulación facetaria izquierda) que empuja hacia el nervio o el engrosamiento de los ligamentos que corren dentro del canal espinal (p. Ej., Ligamentum flavum) también puede apilar a estas sensibles estructuras nerviosas y causar síntomas similares.
Ambas condiciones son comúnmente tratadas por quiroprácticos.