El dolor lumbar relacionado con las piernas (LBRLP, por sus siglas en inglés) es una afección común que lleva a los pacientes a las clínicas de atención primaria, incluidos los consultorios quiroprácticos, pero estos casos a menudo son complejos y determinar la causa subyacente puede ser un desafío clínico. Echemos un vistazo a las estrategias de tratamiento actuales para LBRLP.
Para empezar, el médico del paciente deberá determinar si el dolor en la pierna es radicular o de naturaleza referida, ya que esto ayudará a indicar qué estructuras o tejidos blandos en la parte baja de la espalda deberán tratarse. El término "radicular" se reserva para la presencia de compresión de la raíz nerviosa o una raíz nerviosa pellizcada, más comúnmente causada por una hernia de disco lumbar. El dolor de pierna referido surge de un ligamento, articulación o un desgarro en la capa externa del disco (que puede preceder a la hernia).
Algunos signos clínicos y síntomas que apoyan el dolor radicular en la pierna incluyen un trazado geográfico más específico del dolor en la pierna que a menudo excede el nivel de la rodilla que afecta la parte externa del pie (nervio S1), la parte superior del pie (nervio L5) o la parte interna del pie (nervio L4). En la LBRLP radicular, también puede haber pérdida neurológica, como deterioro sensorial y/o debilidad muscular en un área específica o en ciertos músculos, que pueden ayudar a determinar los nervios específicos involucrados. Los pacientes a menudo describen el dolor de pierna referido como un dolor profundo generalizado o entumecimiento que a menudo permanece por encima de la rodilla. También es posible que el paciente tenga múltiples causas que contribuyan a su LBRLP, lo que puede hacer que el proceso de diagnóstico sea más complejo.
Desde el punto de vista del tratamiento, los estudios muestran una falta de beneficios a largo plazo para el manejo de LBRLP con medicamentos recetados, inyecciones epidurales de corticosteroides y cirugía. Sin embargo, existe evidencia de que la manipulación espinal, un tratamiento proporcionado por médicos quiroprácticos, es más eficaz que ningún tratamiento, modalidades pasivas y ejercicio para controlar la LBRLP. De hecho, una encuesta del 2019 a 1.907 quiroprácticos reveló que el 81% a menudo trata a pacientes con LBRLP.
Investigaciones más recientes sugieren combinar la terapia de manipulación espinal con ejercicio, y la educación del paciente puede proporcionar resultados aún mejores para los pacientes con LBRLP. Esto tiene sentido, ya que se han realizado varios estudios que muestran que un enfoque de manejo multimodal para las afecciones lumbares, como la enfermedad degenerativa de las articulaciones o del disco, la estenosis espinal y las hernias de disco, a menudo es superior a una sola estrategia de tratamiento.