La lumbalgia y la jardinería parecen ir de la mano, ¡especialmente cuando se prepara el jardín tras un largo invierno sedentario! Como saben muchas personas que aman la jardinería, mantenerse al día con las malas hierbas durante el verano también puede pasar factura en la zona lumbar. ¡Echemos un vistazo a cómo minimizar el dolor o las lesiones lumbares!
- Pruebe la jardinería sin labranza (siembra directa) para mantener a raya las malas hierbas.
- Las camas de jardín elevadas significan agacharse y estirarse menos.
- Siembre plantas perennes. ¡Siguen dando cada año!
- Rote entre tareas que requieran distintas posiciones corporales. Determine qué intervalo de tiempo funciona mejor para su espalda (rote cada dos, tres o cinco minutos). ¡Esto evita posturas estáticas incorrectas y prolongadas que pueden provocar dolor de espalda!
- Configure el temporizador de su teléfono para recordarle cuándo es el momento de estirarse (intente cada 5 a 10 minutos, para empezar). Pregúnte a su quiropráctico qué estiramientos específicos son adecuados para usted, ya que todos tenemos necesidades diferentes.
- Fortalecer los músculos centrales puede ayudar a prevenir lesiones. Pída consejos a su quiropráctico sobre qué ejercicios probar primero.
- ¡Flexione usando la técnica de bisagras de cadera! Esto se logra flexionando las rodillas, levantando las nalgas para que la parte baja de la espalda mantenga su curva hacia dentro (lordótica) mientras se inclina y se estira hacia el suelo. ¡Esto minimiza la carga de la lumbar y evita la compresión de los discos intervertebrales!
- Cuando levante bolsas pesadas de cubierta vegetal o tierra para macetas, agarre las esquinas opuestas, arrastre la bolsa cerca de usted y levántela sobre sus piernas como si fuera un estante mientras gira la cadera antes de levantarse y caminar. O utilice una carretilla o un carrito de jardín para mover las bolsas pesadas.
- Mantenga los objetos que esté levantando cerca de usted para reducir la carga en la espalda.
- Arrodíllese si sus rodillas pueden soportarlo y soporte su peso con un brazo mientras el otro trabaja. Utilice un cojín tipo bote o algún otro acolchado para minimizar la presión debajo de las rótulas y evitar la bursitis y el dolor de rodilla.
- Siéntese en el suelo. Retire el peso de la zona lumbar y cambie de posición con frecuencia.
Prefiera las herramientas largas y de gran longitud en lugar de las herramientas manuales y/o rote entre ellas.
Por último, antes de volver a dedicarse a la jardinería, visite a su médico quiropráctico para que le examine. Los estudios han demostrado que los pacientes quiroprácticos que asisten a visitas de bienestar o mantenimiento declaran entre 12 y 13 días menos de casos de lumbalgia al año siguiente.